Genesis 6, 1-5

Aconteció que cuando los hombres comenzaron a multiplicarse sobre la tierra, y les nacieron hijas, los hijos de Ha-Elohim ° vieron que las hijas de los hombres estaban buenas °, y tomaron para sí mujeres de entre todas las que escogieron. Y dijo Adonai Elohim: No permanecerá mi Espíritu con estos hombres para siempre porque son carne. Sus días serán ciento veinte años. En aquellos días, y aún después, los nefileos ° estaban en la tierra, cuando los hijos de Ha-Elohim entraban a las hijas de los hombres y les engendraban ° hijos como ellos mismos °. Estos eran los gigantes de antaño, los hombres de renombre. * Y vio Adonai Elohim que la maldad del hombre había sido multiplicada en la tierra, y su corazón maquinaba de continuo sólo el mal.
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