I Reyes 14, 25-31

El año quinto del rey Roboán, Sosac, rey de Egipto, subió contra Jerusalén, apoderándose de los tesoros del templo del Señor y del palacio real. Se hizo con todo, incluso con los escudos de oro que había fundido Salomón. En su lugar hizo escudos de bronce, que confió a los jefes de la guardia que custodiaban la entrada del palacio real. Cuando entraba el rey en el templo del Señor, los guardianes los portaban y los devolvían después a la sala de guardia. El resto de los hechos de Roboán, cuanto hizo, ¿no está escrito en el libro de los Anales de los Reyes de Judá? Se sucedieron las guerras entre Roboán y Jeroboán. Roboán se durmió con sus padres y lo enterraron en la ciudad de David. Le sucedió en el trono su hijo Abías.
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