Nehemías 7, 6-68

Estos son los habitantes de la provincia que regresaron del cautiverio, a quienes había deportado Nabucodonosor, rey de Babilonia, y que volvieron a Jerusalén y Judá, cada uno a su ciudad. Vinieron con Zorobabel, Josué, nehemías, Azarías, Raamías, Najamaní, Mardoqueo, Bilsán, Mispéret, Bigvay, Najún y Baaná. El número de los hombres del pueblo de Israel fue el siguiente: Descendientes de Parós: dos mil ciento setenta y dos; descendientes de Sefatías, trescientos setenta y dos; descendientes de Araj, seiscientos cincuenta y dos; descendientes de Pajat-Moab, descendientes de Josué y Joab, dos mil ochocientos dieciocho; descendientes de Elán, mil doscientos cincuenta y cuatro; descendientes de Zatú, ochocientos cuarenta y cinco; descendientes de Zacay, setecientos setenta; descendientes de Binuy, seiscientos cuarenta y ocho; descendientes de Bebay, seiscientos veintiocho; descendientes de Azgad, dos mil trescientos veintidós; descendientes de Adonicán, seiscientos sesenta y siete; descendientes de Bigvay, dos mil sesenta y siete; descendientes de Adín, seiscientos cincuenta y cinco; descendientes de Ater, esto es, descendientes de Ezequías, noventa y ocho; descendientes de Jasún, trescientos veintiocho; descendientes de Besay, trescientos veinticuatro; descendientes de Jarif, ciento doce. Hombres oriundos de Gabaón, noventa y cinco; oriundos de Belén y Netofá, ciento ochenta y ocho; oriundos de Anatot, ciento veintiocho; oriundos de Betazmávet, cuarenta y dos; oriundos de Quiriat Yearín, Quefirá y Beerot, setecientos cuarenta y tres; oriundos de Ramá y Gueba, seiscientos veintiuno; oriundos de Micmás, ciento veintidós; oriundos de Betel y Ay, ciento veintitrés. Descendientes de Nebo, cincuenta y dos; descendientes del otro Elán, mil doscientos cincuenta y cuatro; descendientes de Jarín, trescientos veinte; descendientes de Jericó, trescientos cuarenta y cinco; descendientes de Lod, Jadid y Onó, setecientos veinticinco; descendientes de Senaá, tres mil novecientos treinta. Los sacerdotes eran estos: descendientes de Yedaías, de la parentela de Josué, novecientos setenta y tres; descendientes de Imer, mil cincuenta y dos; descendientes de Pasjur, mil doscientos cuarenta y siete; descendientes de Jarín, mil diecisiete. Los levitas eran los siguientes: descendientes de Josué y de Cadmiel, de la familia de Hodías, setenta y cuatro. Los cantores eran ciento cuarenta y ocho descendientes de Asaf. Los porteros eran ciento treinta y ocho descendientes de Salún, de Ater, de Talmón, de Acub, de Jatitay y de Sobay. Los donados eran descendientes de Sijá, de Jasufá, de Tabaot, de Querós, de Siahá, de Padón, de Lebaná, de Jagabá, de Salmay, de Janán, de Guidel, de Gajar, de Reayá, de Resín, de Necodá, de Gazán, de Uzá, de Paséaj, de Besay, de Meunín, de Nefusín, de Bacbuc, de Jacufá, de Jarjur, de Baslut, de Mejidá, de Jarsá, de Barcós, de Siserá, de Témaj, de Nesíaj y de Jatifá. Los siervos de Salomón eran descendientes de Sotay, de Soféret, de Perudá, de Yaalá, de Darcón, de Guidel, de Sefatías, de Jatil, de Poqueret Hasebáin y de Amón. El total de donados y de siervos de Salomón se elevaba a trescientos noventa y dos. Estos son los que regresaron de Tel-Mélaj, Tel-Jarsá, Querub, Addón e Imer, pero no pudieron demostrar que su familia paterna y su estirpe procedían de Israel: seiscientos cuarenta y dos descendientes de Delaías, de Tobías y de Necodá; y de los sacerdotes, los descendientes de Jobaías, de Hacós y de Barzilay, el que se había casado con una de las hijas de Barzilay, el galaadita, y que adoptó el nombre de ellas. Estos buscaron sus títulos genealógicos, pero no los encontraron, por lo que fueron excluidos del sacerdocio. El gobernador les prohibió comer alimentos sagrados hasta que se presentase un sacerdote para consultar los urim y los tumim. La comunidad, al completo, estaba integrada por cuarenta y dos mil trescientas sesenta personas, sin contar sus esclavos y esclavas, que eran siete mil trescientos treinta y siete. También había doscientos cuarenta y cinco cantores y cantoras. Disponían de setecientos treinta y seis caballos y doscientos cuarenta y cinco mulos.
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