Isaías 54, 6-8

Como mujer abandonada y desolada de espíritu, te ha llamado Yahvé. Y la esposa déla juventud, ¿podrá ser repudiada? dice tu Dios. Por un breve momento te abandoné, pero con gran misericordia te recojo. En un rapto de cólera oculté de ti un instante mi rostro, pero con amor eterno me apiadé de ti, dice Yahvé, tu Redentor.
Ver contexto