Isaías 9, 6-7

Porque un niño nos es nacido, un Hijo nos es dado y la autoridad está sobre su hombro; y su Nombre será llamado: “Admirable, Consejero, Poderoso Dios Eterno, Príncipe de Paz”. El aumento de su dominio y de su paz no tendrá fin sobre el trono de David y sobre su reino, para establecerlo y afianzarlo con el derecho y con la justicia, desde ahora y hasta la eternidad. El celo de Yahweh de los ejércitos hará esto.
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