Hechos 2, 17-21
“
Y en los postreros días, dice Dios,Derramaré de mi Espíritu sobre toda carne,Y vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán;Vuestros jóvenes verán visiones,Y vuestros ancianos soñarán sueños; Y de cierto sobre mis siervos y sobre mis siervas en aquellos díasDerramaré de mi Espíritu, y profetizarán. Y daré prodigios arriba en el cielo,Y señales abajo en la tierra,Sangre y fuego y vapor de humo; El sol se convertirá en tinieblas,Y la luna en sangre,Antes que venga el día del Señor,Grande y manifiesto; Y todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.b ”