— perderos a los dos: Si Esaú mataba a su hermano, tendría que huir lejos de su tribu o caer bajo la sanción conocida como “venganza de la sangre” (ver Éxo 21:23-25; Núm 35:12). De ese modo, Rebeca perdería de una sola vez a sus dos hijos (Ver 2Sa 14:6-7).