Exodo  12 Biblia Hispanoamericana de la Nueva Evangelización (Sociedad Bíblica, 2015) | 51 versitos |
1

La salida de Egipto (12:1—15:21)

La Pascua

Estando aún Moisés y Aarón en Egipto, les dijo el Señor:
2 — Este mes será para ustedes el principal, el mes con que comenzarán el año º.
3 Digan a toda la comunidad de Israel: el diez de este mes cada uno tomará un cordero, uno por cada casa y familia.
4 Si la familia es muy pequeña para comérselo entero, que se junte con su vecino más próximo teniendo en cuenta el número de comensales y la porción de cordero que cada uno pueda comer.
5 El cordero deberá ser de un año, macho y sin ningún defecto. Podrá ser cordero o cabrito.
6 Lo guardarán hasta el día catorce de este mes, y en la tarde º de ese día toda la comunidad de Israel procederá a inmolarlo.
7 Untarán luego con la sangre del animal las jambas y el dintel de la puerta de las casas en que se haya de comer.
8 En esa noche se comerá la carne asada al fuego, acompañada de hierbas amargas y panes sin levadura º.
9 No comerán nada crudo o cocido. Todo deberá estar asado al fuego: cabeza, patas y vísceras.
10 Nada dejarán para el día siguiente; si queda algo, lo quemarán º.
11 Lo comerán así: la túnica atada, las sandalias abrochadas y la vara en la mano; lo comerán a toda prisa. Es la Pascua del Señor º.
12 Esa noche recorreré el país de Egipto para exterminar a todos sus primogénitos, tanto personas como animales. De este modo, yo, el Señor, daré un justo escarmiento a todos los dioses egipcios.
13 La sangre servirá de señal en las casas que ustedes habitan: cuando yo vea la sangre pasaré de largo º y no les alcanzará la plaga exterminadora con que castigaré a Egipto.
14 Ese será para ustedes un día memorable; en él celebrarán fiesta en honor del Señor, y esto quedará como institución perpetua para las generaciones futuras.
15

Los panes sin levadura

Durante siete días comerán panes sin levadura º; desde el primer día harán desaparecer la levadura de sus casas, porque cualquiera que comiere algo fermentado durante esos días será expulsado de Israel.
16 Tanto el primer día como el séptimo, celebrarán una asamblea sagrada. Durante esos días no estará permitido realizar ningún trabajo, exceptuando únicamente el necesario para preparar la comida.
17 Observarán la fiesta de los Panes sin levadura, porque en ese día saqué yo a sus tribus de Egipto. Celebrarán ese día como institución perpetua para las generaciones venideras.
18 Desde la tarde del día catorce del primer mes hasta la tarde del veintiuno comerán panes sin levadura.
19 Durante esos siete días no deberá haber levadura en sus casas, porque cualquiera que coma algo fermentado, tanto si es extranjero como si es israelita, será expulsado de la comunidad de Israel.
20 No comerán nada fermentado; donde quiera que vivan, comerán panes sin levadura.
21

Sacrificio del cordero

Moisés convocó a todos los ancianos de Israel y les dijo: — Vayan a escoger un cordero por familia, e inmólenlo para celebrar la Pascua.
22 Después tomen un manojo de hisopo º, empápenlo en la sangre del animal recogida en un recipiente, y unten con ella el dintel y las dos jambas de la puerta. Que nadie salga de su casa hasta la mañana siguiente.
23 Porque el Señor pasará hiriendo de muerte a los egipcios, y cuando vea la sangre en el dintel y en las dos jambas, pasará sin detenerse en aquella puerta y no dejará que el exterminador º entre en sus casas para matar.
24 Obedezcan este mandato del Señor como una ley perpetua para ustedes y para sus hijos.
25 Cuando ustedes entren en la tierra que el Señor les va a dar, tal como lo ha prometido, seguirán celebrando este rito.
26 Y cuando sus hijos les pregunten: “¿Qué significa este rito?”,
27 les responderán: “Es el sacrificio de la Pascua en honor del Señor, que pasó sin detenerse en las casas de los israelitas en Egipto, cuando hirió de muerte a los egipcios y protegió a nuestras familias”. Entonces los israelitas se postraron en actitud de adoración.
28 Luego hicieron lo que el Señor había ordenado a Moisés y Aarón.
29

La muerte de los primogénitos

A medianoche, el Señor hizo morir a los primogénitos en Egipto, desde el primogénito del faraón —heredero del trono— hasta el primogénito del que estaba encerrado en el calabozo, y también a las primeras crías del ganado. º
30 Se levantó aquella noche el faraón junto con sus cortesanos y todos los egipcios, y un alarido inmenso se oyó en todo Egipto porque no había casa en donde no hubiera algún muerto.
31 Esa misma noche el faraón mandó llamar a Moisés y Aarón para decirles: — Marchénse, aléjense de mi gente; ustedes y todos los israelitas vayan a ofrecer culto al Señor, como lo pidieron.
32 Lleven también con ustedes las ovejas y las vacas, como querían, y márchense. Y rueguen por mí º.
33

Éxodo de Egipto

Los egipcios apuraban al pueblo, para que saliese del país cuanto antes, pues decían: “Vamos a morir todos”.
34 El pueblo recogió la masa de harina aún sin fermentar y, junto con las artesas, la envolvieron en mantas y se la echaron al hombro.
35 Además, obedeciendo las órdenes de Moisés, les pidieron a los egipcios objetos de oro y plata, y vestidos. º
36 El Señor hizo que los israelitas se ganasen el favor de los egipcios, que les dieron todo cuanto les pedían. Así fue como despojaron a los egipcios.
37 Los israelitas partieron de Ramsés en dirección a Sucot *; eran más de seiscientos mil º hombres de a pie, sin contar los niños.
38 Además partió con ellos una enorme muchedumbre de gente con gran cantidad de ovejas y vacas.
39 Como la masa que sacaron de Egipto no llegó a fermentar, la cocieron e hicieron panes sin levadura, pues al tener que salir precipitadamente, expulsados por los egipcios, no tuvieron tiempo de hacer otras provisiones para el viaje. º
40 Los israelitas estuvieron en Egipto cuatrocientos treinta años. º
41 Y justo en el mismo día en que se cumplían los cuatrocientos treinta años, todos los ejércitos del Señor salieron de Egipto.
42 Aquella noche el Señor veló para sacarlos de Egipto. Esa es la noche del Señor, noche en que los israelitas también deberán mantenerse en vela generación tras generación.
43

Leyes de la Pascua

El Señor dijo a Moisés y Aarón: — Estas son las instrucciones relativas a la Pascua: Ningún extranjero podrá comer el cordero pascual.
44 En cambio, sí podrá comer de él el esclavo que hayas comprado y circuncidado.
45 Tampoco lo comerá el inmigrante ni el jornalero.
46 Lo comerán todo en la misma casa. No se sacará de la casa el más mínimo trozo de carne del animal sacrificado, ni se le quebrará un solo hueso. º
47 Toda la comunidad de Israel celebrará la Pascua.
48 Y si el inmigrante que vive con ustedes quiere celebrar la Pascua en honor del Señor, antes deberá circuncidar a todos los varones de su familia. Después de esto podrá celebrar la Pascua como uno más de ustedes. Pero ningún incircunciso participará de la Pascua. º
49 Habrá una misma ley para los nativos y para los inmigrantes que habiten entre ustedes.
50 Los israelitas lo hicieron todo según lo ordenado por el Señor a Moisés y Aarón.
51 Y aquel mismo día, el Señor sacó de Egipto a los israelitas como un ejército en orden de batalla.

Patrocinio

 
 

Introducción a Exodo 

INTRODUCCIÓN


1. Características generales


El libro de Éxodo comienza recapitulando una información ya dada en el Génesis. La lista de los descendientes de Jacob que entraron en Egipto ha aparecido en Gén 46:8 ss con la tradición de setenta personas. La muerte de José ha sido relatada en Gén 50:26. Al mismo tiempo, en el pasaje inicial de Éxodo se introduce material nuevo que supone un paso adelante respecto al relato de Génesis, especialmente la muerte de toda la generación de José y el crecimiento del pueblo. Así pues, el comienzo de Éxodo apunta tanto al pasado (los patriarcas) como al futuro (la historia de la liberación de la opresión egipcia).


2. Título y contenido


El segundo libro de la Biblia, llamado en hebreo Eleh Shemot (“estos son los nombres”), por sus primeras palabras, recibió en la versión griega de los LXX el título de Éxodos, fiel reflejo de su acontecimiento central: la salida de Egipto.


Como ya se ha señalado, el libro de Éxodo presupone y continúa los relatos de Génesis, pero introduce al mismo tiempo un cambio importante. En la historia patriarcal (Gén 12:1-20Gén 50:1-26), los protagonistas habían sido siempre figuras individuales; ahora, por el contrario, va a ocupar un lugar destacado un nuevo personaje, no individual sino colectivo: el pueblo. Esta transición se pone de relieve expresamente al comienzo del libro, cuando el texto hace notar que las setenta personas que habían llegado a Egipto con Jacob se multiplicaron de tal manera que llenaban toda la región (Éxo 1:5; Éxo 1:7).


La primera parte de la narración tiene como tema central el gran acontecimiento a que hace referencia el título del libro: el éxodo o la salida de Egipto (cps. Éxo 1:1-22Éxo 15:1-27). Una sección que comienza describiendo el cambio de situación que se produjo con la ascensión al trono de un rey que no sentía ningún aprecio por la memoria de José (Éxo 1:8), y que culmina con la celebración de la primera Pascua (cp. Éxo 12:1-51) y con el canto de acción de gracias que entonaron Moisés y los israelitas después de cruzar el cauce del mar como si fuera tierra seca (Éxo 15:1-21).


La segunda sección (Éxo 15:22Éxo 18:27) narra algunos episodios relacionados con la marcha de los israelitas a través del desierto. El grupo que había salido de Egipto penetró en la península del Sinaí —región semidesértica— donde, siempre bajo la guía de Moisés, tuvo que hacer frente a distintas situaciones críticas.


La tercera sección (Éxo 19:1-25Éxo 40:1-38) está constituida por los acontecimientos del Sinaí que tienen como momento central el establecimiento del pacto o alianza entre Yahvé —el Señor— y su pueblo. Este acontecimiento incluye, como uno de sus elementos esenciales, la proclamación de la ley tanto en su aspecto moral (Éxo 20:1-26Éxo 24:1-18) como cultual (Éxo 25:1-40Éxo 40:1-38). En última instancia, toda la legislación contenida en el libro de Éxodo, con su evidente preocupación por defender el derecho de los más débiles y desprotegidos (ver Éxo 22:22-28), tenía como finalidad fundamental sentar las bases de una comunidad cimentada en la solidaridad y la justicia y consagrada al culto del verdadero Dios.


3. Marco histórico


Los relatos de Éxodo se mueven entre dos puntos geográficos precisos: Egipto y el Sinaí; entre ambos tiene lugar la primera parte de la marcha por el desierto. Allí se desarrollaron los acontecimientos que hicieron de Israel el Pueblo de Dios: la salida de Egipto, el paso del mar Rojo y la Alianza del Sinaí. El recuerdo de estos acontecimientos se grabó para siempre en la memoria de Israel y se convirtió en el fundamento mismo de su fe. Por eso, el libro de Éxodo ocupa un lugar muy destacado entre los libros veterotestamentarios y ha sido llamado el “Evangelio del Antiguo Testamento”.


El contenido de Éxodo no aporta elementos suficientes para fijar con absoluta precisión la fecha en que acontecieron los hechos narrados en el libro. Sin embargo, en Éxo 1:11 se hace notar expresamente que los descendientes de Jacob emigrados a Egipto fueron forzados a trabajar en la construcción de las ciudades de Pitón y Ramsés. Este dato nos lleva con cierta probabilidad al siglo XIII a. C., cuando el faraón egipcio Ramsés II hizo erigir, en el delta oriental del Nilo, una nueva capital llamada Casa de Ramsés. En tal circunstancia, los israelitas fueron duramente explotados hasta el punto de verse forzados a huir. El ejército egipcio los persiguió, pero el Señor los libró milagrosamente de sus perseguidores. El testimonio más antiguo de esta liberación es el canto de triunfo de Éxo 15:21, que celebra el acontecimiento no como una victoria de Israel, sino como una acción de Dios.


4. Características literarias


El libro de Éxodo es el resultado final de, al menos, tres ediciones elaboradas en distintos contextos históricos y designadas convencionalmente como historias o tradiciones yavista, elohista y sacerdotal, con leves retoques deuteronomistas. Estas historias utilizaron, a su vez, tradiciones orales previas y otras fuentes diversas, algunas de ellas escritas. En el conjunto se advierten tres tipos de materiales: narrativos, legales y litúrgicos.


— Entre el material narrativo hay que destacar los relatos que describen la opresión de los hebreos, la epopeya del éxodo, la travesía del desierto y la teofanía del Sinaí. A su vez, todos estos relatos se expresan en una gran variedad de géneros: relatos épicos (cps. Éxo 4:1-31Éxo 14:1-31), relatos legendarios (cp. Éxo 2:1-25), relatos de vocación (cps. Éxo 3:1-22 y Éxo 6:1-30), cantos heroicos (cp. Éxo 15:1-27), teofanías (Éxo 3:1-6), litigios o pleitos judiciales (Éxo 15:22-26; Éxo 19:16-25), relatos etiológicos y genealogías.


— El material legal se concentra fundamentalmente en la última parte del libro (cps. Éxo 19:1-25Éxo 40:1-38) y está representado por tres cuerpos de leyes: el decálogo (Éxo 20:1-17), de origen antiguo, aunque incorporado tardíamente al actual contexto; el código de la Alianza (Éxo 20:22-26; Éxo 21:1-36; Éxo 22:2-31; Éxo 23:1-19), compilación mixta de leyes religiosas y sobre todo sociales, posteriores a la instalación en Canaán, pero anteriores a la monarquía; y finalmente las normas cultuales (Éxo 25:1-40Éxo 31:1-18; Éxo 35:1-35Éxo 40:1-38), relativas al santuario y al culto, con elementos muy antiguos y otros bastante tardíos. También habría que mencionar el llamado decálogo ritual (Éxo 34:14-28) o “código yavista de la alianza”.


— El material litúrgico aparece mucho más disperso: generalmente se encuentra envuelto en formas narrativas o legales, por ejemplo Éxo 11:1Éxo 13:16; Éxo 14:1-31; Éxo 15:1-27; Éxo 19:1-15; Éxo 24:1-11; Éxo 20:22Éxo 23:19.


5. Estructura y divisiones


El éxodo se desenvuelve principalmente en tres escenarios: Egipto, el desierto y el monte Sinaí, que dan pie para dividir el libro en tres partes, subdivididas a su vez en distintas secciones:


I.— LA SALIDA DE EGIPTO (Éxo 1:1Éxo 15:21)


Israel oprimido en Egipto. Nacimiento y juventud de Moisés (Éxo 1:1-22Éxo 2:1-25)


Vocación y misión de Moisés (Éxo 3:1Éxo 7:7)


Las plagas de Egipto (Éxo 7:8Éxo 11:10)


La salida de Egipto (Éxo 12:1Éxo 15:21)


II.— LA MARCHA A TRAVÉS DEL DESIERTO (Éxo 15:22Éxo 18:27)


Quejas del pueblo (Éxo 15:22Éxo 17:16)


Institución de los Jueces (Éxo 18:1-27)


III.— LOS ACONTECIMIENTOS DEL SINAÍ (Éxo 19:1-25Éxo 40:1-38)


La Alianza del Sinaí (Éxo 19:1Éxo 20:21)


El Código de la Alianza (Éxo 20:22Éxo 23:33)


Confirmación de la Alianza (Éxo 24:1-18)


Instrucciones sobre el santuario y el culto (Éxo 25:1Éxo 31:17)


Ruptura y renovación de la Alianza (Éxo 31:18Éxo 34:35)


Ejecución de las instrucciones (Éxo 35:1-35Éxo 40:1-38)


6. Claves teológicas


Los relatos de Éxodo constituyen la epopeya nacional de Israel en cuya formación desempeñaron un papel decisivo las fiestas y celebraciones cultuales. La celebración de la Pascua, sobre todo, rememoraba y actualizaba aquellos grandes acontecimientos del pasado, de forma que todas las generaciones israelitas pudieran revivir la salida de Egipto y renovar el compromiso asumido por el pueblo en el Sinaí.


Por eso, el libro de Éxodo no es una “historia” en el sentido moderno de la palabra; es más bien un testimonio y una confesión de fe; es el reconocimiento de que la existencia de Israel como nación no es una obra humana, sino una creación de Dios.


Los temas teológicos clave están hábilmente elaborados dentro del texto; señalamos aquí los más representativos:


Presencia divina. En Éxo 2:23-24 el autor señala, en primer lugar, la ausencia divina, y después su presencia. Los gemidos y lamentos de los esclavos israelitas hacen que Dios recuerde la alianza con los patriarcas. La tarea que Dios encomienda a Moisés y la intervención divina, especialmente en las plagas, establecen claramente la prioridad de la presencia de Dios. En concreto, la imagen de Dios se configura a partir de la revelación de su nombre: Yahvé, el Señor, el que está siempre dispuesto a acudir en defensa de sus elegidos.


Liberación. Los dos elementos básicos del credo de Israel son que el Señor los sacó de Egipto y que los llevó a la tierra prometida. El libro de Éxodo escenifica y celebra el primero de estos dos acontecimientos. El pueblo toma conciencia de que es el Señor quien los liberó de la esclavitud y desde ese momento se convirtió en su Señor y gran liberador.


Sentido de la alianza. La alianza es la especialísima relación entre el Señor e Israel que se crea en el monte Sinaí. Es un vínculo personal por el cual Israel se convierte en el pueblo del Señor, y el Señor se convierte en el Dios de Israel. Es esta conexión moral única la que confiere a Israel su identidad entre todos los demás pueblos del antiguo Oriente Próximo.


Ley como respuesta a la alianza. Aceptando y comprometiéndose a cumplir fielmente la ley con que Dios acompaña la alianza, Israel responde de forma personal a su relación con él. La ley se recibe, no como una imposición desde fuera, sino como un reconocimiento desde dentro de la necesidad de honrar y respetar tanto al Dios de la alianza como a las demás personas.


Por lo demás, los grandes temas del Éxodo están presentes en toda la Biblia. A ellos se refieren los Profetas para anunciar un nuevo éxodo (Isa 43:18-21) y una nueva Alianza (Jer 31:31-34). El Nuevo Testamento convierte a Éxodo en fuente privilegiada de inspiración y actualización: desde Mateo (infancia de Jesús, sermón del monte) hasta el Apocalipsis (Cristo como nuevo cordero), la mayoría de los autores y escritos aluden a episodios, temas y motivos del éxodo. El NT presenta los acontecimientos del éxodo como una prefiguración de la obra redentora de Cristo, que es la verdadera “Pascua” (1Co 5:7) y una “Alianza” más excelente (Heb 8:6) por cuanto ha sido sellada con su sangre. La epopeya del éxodo constituye el prototipo de todos los actos salvíficos de Dios, en especial, del Bautismo (1Co 10:1-4) y los relatos del libro de Éxodo conforman la gran estructura teológica, simbólica y literaria sobre la que el cristianismo ha confrontado y comprendido su experiencia.


Fuente: Biblia Hispano Americana (Sociedad Bíblica Española, 2014)

Patrocinio

Notas

Exodo  12,2— con el que comenzarán el año: Se refiere al mes de Abib o de las espigas (Éxo 13:4; Deu 16:1), que en nuestro calendario corresponde a la segunda mitad de marzo y primera de abril. Después del exilio babilónico tomó el nombre de Nisán (Neh 2:1; Est 3:7).


Exodo  12,6— en la tarde: Lit. entre las dos tardes. Período de tiempo entre el ocaso del sol y la noche cerrada. Otros consideran que es el tiempo entre la caída de la tarde y la puesta de sol.
Exodo  12,8— panes sin levadura: También llamados panes ácimos.
Exodo  12,10— lo quemarán: Para evitar la profanación. La versión griega añade: no se ha de quebrantar ninguno de sus huesos. Ver v. Éxo 12:46.
Exodo  12,11— Pascua del Señor: En sus inicios, la Pascua era una fiesta de origen preisraelita vinculada a la protección de los rebaños de pastores nómadas. Después pasó a ser la celebración más importante del pueblo judío al conmemorar que el Señor liberó al pueblo de Israel de la esclavitud de Egipto (ver Lev 23:5; Núm 9:1-5; Núm 28:16; Deu 16:1-2). En el NT la Pascua adquiere un nuevo significado para los cristianos, ya que en ella se celebra la obra redentora de Cristo. Ver VOCABULARIO BÍBLICO.
Exodo  12,13— pasaré de largo: La tradición judía relacionó la palabra “pascua” (Heb. pesaj) con el verbo pasaj, que significa “saltar”, “pasar por alto” o “pasar de largo”; con ello se aludía al hecho de que el Señor pasó de largo ante las casas israelitas sin hacer ningún daño a sus moradores; (ver Éxo 12:27).
Exodo  12,15— panes sin levadura: La fiesta de los Panes sin levadura o de los Ácimos señalaba el comienzo de la siega de los cereales (primavera). Duraba siete días y seguía inmediatamente a la Pascua; con el tiempo llegó a considerarse parte de ella (Deu 16:1-8; Lev 23:6-8; Núm 28:17-25).
Exodo  12,22— manojo de hisopo: El hisopo es una planta aromática que se utilizaba en diversos ritos de purificación (Núm 19:6; Sal 51:7; Heb 9:19) y cuyas ramas, preparadas en forma de manojos, se utilizaban para rociar algo con agua purificadora (ver Sal 51:5), o con otro líquido.
Exodo  12,23— el exterminador: Probablemente se trata de un ángel (ver los ángeles mencionados en 2Sa 24:16-17; 1Co 10:10; Heb 11:28) que es el mensajero encargado de ejecutar las venganzas divinas (Gén 19:1, Gén 19:13; 2Sa 24:16; 2Re 19:35).
Exodo  12,29Éxo 4:22-23.
Exodo  12,32— y rueguen por mí: Otra posible traducción: y agradézcanmelo a mí.
Exodo  12,35Éxo 3:21-22; Éxo 11:2-3; Sal 105:37.
Exodo  12,37— Sucot: Localidad egipcia situada en el delta del Nilo. Ver Éxo 14:2. No se ha de confundir esta Sucot con la ciudad del mismo nombre localizada en la Transjordania (Gén 33:17).

— eran más de seiscientos mil: Esta cifra responde, sin duda, a una idealización de la realidad.
Exodo  12,39Éxo 12:34; Deu 16:3.
Exodo  12,40Gén 15:13-16; Hch 7:6; Gál 3:17.
Exodo  12,46Núm 9:12; Jua 19:36.
Exodo  12,48Núm 9:14.