II Reyes  20 Biblia Hispanoamericana de la Nueva Evangelización (Sociedad Bíblica, 2015) | 21 versitos |
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Enfermedad y curación de Ezequías

(Is 38:1-8)

Por aquel tiempo º enfermó gravemente Ezequías. El profeta Isaías, hijo de Amós, fue a visitarlo y le dijo: — Esto dice el Señor: “Pon en orden tus asuntos, pues vas a morir; no te curarás”. º
2 Ezequías se volvió cara a la pared y oró con estas palabras al Señor:
3 — ¡Ay, Señor! recuerda que me he comportado con fidelidad y rectitud en tu presencia, haciendo lo que te agrada. Y rompió a llorar a lágrima viva.
4 Antes de que Isaías hubiese salido del patio, le llegó este mensaje del Señor:
5 — Vuelve y dile a Ezequías, el jefe de mi pueblo: “Así dice el Señor, Dios de tu antepasado David: He oído tu oración y he visto tus lágrimas. Voy a curarte, y dentro de tres días podrás ir al Templo del Señor.
6 Voy a alargar tu vida otros quince años; libraré a ti y a esta ciudad de caer en poder del rey de Asiria, y la defenderé por mi honor y el de David, mi servidor”.
7 Luego Isaías ordenó: — Tráiganme una torta de higos. Se la llevaron, la aplicaron sobre la parte enferma y Ezequías sanó.
8 Entonces Ezequías preguntó a Isaías: — ¿Cuál será la señal º de que el Señor me curará y de que en tres días podré ir al Templo? º
9 Isaías le respondió: — Esta será la señal de que el Señor cumplirá la promesa que te ha hecho. ¿Qué prefieres, que la sombra avance diez grados o que retroceda otros tantos?
10 Ezequías dijo: — Lo normal es que la sombra avance. Prefiero que retroceda diez grados.
11 Entonces el profeta Isaías invocó al Señor, y el Señor hizo que la sombra retrocediera diez grados en el reloj de sol º de Ajaz.
12

Embajada babilónica

(2 Cr 32:30,32-33)

Por entonces * el rey de Babilonia, Merodac Baladán º, hijo de Baladán, mandó una carta y un regalo a Ezequías, pues se había enterado de que estaba enfermo.
13 Ezequías atendió a los mensajeros y les mostró el palacio y sus tesoros: la plata y el oro, las especias y perfumes, la armería y todo lo que había en sus depósitos. Ezequías no dejó nada sin enseñarles de su palacio y de todos sus dominios. º
14 Luego el profeta Isaías fue a ver al rey Ezequías y le preguntó: — ¿Qué te dijeron esos hombres? ¿De dónde han venido? Ezequías respondió: — Han venido de Babilonia, un país lejano.
15 Isaías preguntó de nuevo: — ¿Y qué han visto en tu palacio? Ezequías le dijo: — Todo lo que hay en palacio. No ha quedado nada de mis tesoros por enseñarles.
16 Entonces Isaías le dijo: — Escucha este mensaje del Señor:
17 “Llegará un día en que se llevarán a Babilonia º todo lo que hay en tu palacio, todo lo que tus antepasados han reunido hasta hoy, y no quedará nada, dice el Señor.
18 Incluso a algunos de los hijos que tienes y que has engendrado, los emplearán como eunucos en el palacio del rey de Babilonia.”
19 Ezequías dijo: — Me parece bien la palabra del Señor que me has anunciado. Pues pensaba que durante su vida, al menos, habría paz y seguridad.
20

Conclusión del reinado de Ezequías

(2 Cr 32:30,32-33)

El resto de la historia de Ezequías y todas sus hazañas, la alberca y el canal º que hizo para llevar las aguas a la ciudad, está escrito en el libro de los Anales de los Reyes de Judá. º
21 Cuando Ezequías murió º, su hijo Manasés le sucedió como rey.

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Introducción a II Reyes 

VER 1 REYES.


Fuente:

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Notas

II Reyes  20,12Cr 32:24.


II Reyes  20,1— Por aquel tiempo: La indicación cronológica sobre la enfermedad de Ezequías es lo suficientemente vaga como para poder datar la enfermedad antes de la invasión, hacia el año 713, contemplando el oráculo de la liberación de Jerusalén (2Re 20:6) como un anuncio a largo plazo.
II Reyes  20,8— la señal: Se advierte un desajuste entre la acción curativa de Isaías, que parece haber surtido efecto (2Re 20:7) y la señal que pide Ezequías referida a un futuro más o menos próximo. Quizá la solución más lógica radique en un cambio de orden: al oráculo (2Re 20:5-6) seguiría la señal (2Re 20:8-11) y finalmente la aplicación del remedio curativo (2Re 20:7).
II Reyes  20,8Ver 1Sa 14:10.
II Reyes  20,11— en el reloj de sol: Lit. en los escalones de Ajaz: Se trata de la escalera de acceso a la azotea de la sala superior construida por Ajaz (ver 2Re 23:12), donde estarían marcadas las señales horarias.
II Reyes  20,12— Por entonces: De nuevo una datación imprecisa (ver 2Re 20:1 y nota). La coincidencia de la embajada babilónica con la enfermedad de Ezequías permitiría situarla entre los años 713-711 a. C., cuando el rey babilónico busca en occidente posibles socios para formar una alianza antiasiria. Otros proponen el año 703 para ambos episodios.

— Merodac Baladán: Reinó en Babilonia desde el 721 al 710 y nueve meses durante el 703 a. C.
II Reyes  20,132Cr 32:27-28; 2Cr 32:31.
II Reyes  20,17— se llevarán a Babilonia: Anuncio de los acontecimientos de los años 598 y 587 a. C. narrados en 2Re 24:13 y 2Re 25:13-15.
II Reyes  20,20— el canal: Conocido también como el túnel de Ezequías, fue excavado en la roca para transportar el agua desde la fuente de Guijón, fuera de las murallas, hasta la piscina de Siloé. Esta magnífica obra hidráulica aún perdura, junto con su inscripción conmemorativa.
II Reyes  20,20Sir 48:17.
II Reyes  20,21— murió: Nada se dice sobre el lugar de su enterramiento, cosa que sí hace con cierto detalle 2Cr 32:33.