Salmos 118 La Biblia (Serafín de Ausejo, 1975) | 29 versitos |
1 Alabad al Señor, que es bondadoso y su amor es eterno.
2 Que lo diga la casa de Israel, que su amor es eterno;
3 que lo diga la casa de Aarón, que su amor es eterno;
4 que lo digan los fieles del Señor, que su amor es eterno.
5 En la angustia yo clamo hacia el Señor, y el Señor me socorre con la holgura.
6 El Señor está conmigo: no tengo que temer, ¿qué puede hacerme el hombre?
7 El Señor está por mí, con mis tutores, y yo veré humillado a mi enemigo.
8 Preferible es acogerse en el Señor a fiarse del hombre;
9 preferible es acogerse en el Señor a confiar en los grandes.
10 Una turba de gentes me rodea, en nombre del Señor los haré trizas;
11 me asedian y circundan, en nombre del Señor los haré trizas;
12 Me cercan como abejas, me consumen como el fuego los espinos, en nombre del Señor los haré trizas.
13 Con encono me empujan por que caiga, pero el Señor es mi socorro.
14 El Señor es mi fortaleza y mi cantar y él es mi salvación.
15 Suenan voces de gozo y de victoria en las tiendas del justo: la diestra del Señor hace proezas,
16 la diestra del Señor es prominente, la diestra del Señor hace proezas.
17 No es mi caso el morir, sino el vivir y celebrar las obras del Señor.
18 Ciertamente el Señor me corrige con dureza, pero no me consigna ante la muerte.
19 Abridme las puertas de justicia, quiero entrar y dar gracias al Señor.
20 Por aquí está la puerta hacia el Señor, por la que entran los justos.
21 Te doy gracias por haberme respondido, por haberme hecho triunfar.
22 La piedra que el cantero desechara, se ha tornado en remate de la esquina.
23 Ello se hizo por obra del Señor, y es maravilla a nuestros ojos.
24 El Señor ha actuado en este día: cantemos y alegrémonos en él.
25 Ah Señor, presta la ayuda; ah Señor, concede el éxito.
26 Benditos los que vienen en nombre del Señor, del templo del Señor os bendecimos.
27 El es el Dios que nos alumbra: ordenad fiesta con palmas hasta los cuernos del altar.
28 Tú, mi Dios, yo quiero darte gracias; mi Señor, yo quiero enaltecerte.
29 Alabad al Señor, que es bondadoso y su amor es eterno.

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Introducción a Salmos

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Fuente: Comentario al Nuevo Testamento (Serafín de Ausejo, 1975)

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Notas