Job  1 La Biblia (Serafín de Ausejo, 1975) | 22 versitos |
1 Había en la región de Us un hombre llamado Job. Era íntegro y recto, temía a Dios y evitaba el mal.
2 Le habían nacido siete hijos y tres hijas.
3 Su hacienda se componía de siete mil ovejas, tres mil camellos, quinientas yuntas de bueyes y quinientas asnas. Además poseía una copiosa servidumbre. Aquel hombre era el más grande entre todos los hijos de Oriente.
4 Tenían sus hijos la costumbre de celebrar banquetes, cada día en casa de uno, invitando a sus tres hermanas a comer y beber con ellos.
5 Una vez terminados los días de banquete, Job los hacía venir para purificarlos y, levantándose muy de mañana, ofrecía un holocausto por cada uno de ellos, pues decía para sí: Quizá mis hijos hayan pecado y maldecido a Dios en su corazón. Así hacía Job constantemente.
6 Sucedió un día que los hijos de Dios fueron a presentarse ante Yahvéh, y entre ellos se presentó también Satán.
7 Entonces le dijo Yahvéh: ¿De dónde vienes? Respondió Satán: De merodear por la tierra y pasearme por ella.
8 ¿Has reparado - le dijo Yahvéh - en mi siervo Job? No hay otro igual en la tierra. Es hombre íntegro y recto, teme a Dios y evita el mal.
9 Y Satán respondió a Yahvéh: ¿Acaso Job teme a Dios de balde?
10 ¿No has levantado una valla en torno a él, a su casa y a sus bienes? Has bendecido sus empresas, y sus rebaños inundan la región.
11 Pero prueba a extender tu mano y tocar su hacienda. ¡Ya verás cómo te maldice ante tu propia cara!
12 Dijo Yahvéh a Satán: De acuerdo: puedes disponer de todos sus bienes. Pero a él no le toques. Y Satán se alejó de Yahvéh.
13 Un día en que los hijos y las hijas de Job se hallaban comiendo y bebiendo en casa del hermano mayor,
14 llegó a Job un mensajero y le dijo: Estaban los bueyes arando y las asnas paciendo a su lado,
15 cuando llegaron de repente los sábeos y se los llevaron. Con la espada dieron muerte a los criados. Sólo yo he logrado escapar para traerte la noticia.
16 Estaba éste hablando todavía, cuando llegó otro y le dijo: Del cielo cayó fuego de Dios: fulminó a tus ovejas y a tus criados, y los consumió. Sólo yo he logrado escapar para traerte la noticia.
17 Estaba éste hablando todavía, cuando llegó otro y le dijo: Los caldeos formaron tres grupos, cayeron sobre tus camellos y se los llevaron. Con la espada dieron muerte a los criados. Sólo yo he logrado escapar para traerte la noticia.
18 Estaba éste hablando todavía, cuando llegó otro y le dijo: Se hallaban tus hijos e hijas comiendo y bebiendo en casa del hermano mayor,
19 cuando de repente vino un fuerte vendaval de lado del desierto y dio contra las cuatro esquinas de la casa. Ésta se derrumbó sobre los jóvenes, los cuales murieron. Sólo yo he logrado escapar para traerte la noticia.
20 Entonces Job se levantó, rasgó sus vestiduras y se rasuró la cabeza. Luego, se echó en tierra, se postró
21 y dijo: Desnudo salí del seno de mi madre y desnudo allá volveré. Yahvéh me lo dio, Yahvéh me lo quitó. ¡Bendito sea el nombre de Yahvéh!
22 En nada de esto pecó Job ni profirió insolencia alguna contra Yahvéh.

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Introducción a Job 

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Fuente: Comentario al Nuevo Testamento (Serafín de Ausejo, 1975)

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Notas