Salmos 83 La Biblia (Serafín de Ausejo, 1975) | 18 versitos |
1 Canto; salmo, de Asaf.

No te quedes, Dios callado, no te tengas en silencio e inactivo.
2 Mira a tus enemigos agitarse, a los que te aborrecen, levantando la cabeza.
3 Urdiendo están un plan contra tu pueblo y tomando consejo contra tus protegidos.
4 Venid - dicen -, borrémoslos como pueblo, y no se vuelva a mencionar el nombre de Israel.
5 Entre todos vinieron a un acuerdo, hicieron una alianza contra ti
6 las cabilas de Edom e Ismael, los moabitas y agarenos,
7 Guebal, Amón y Amaleq, Filistea y los tirios.
8 Con ellos va también unido Asur, dando la mano a los vástagos de Lot. Selah
9 Haz con ellos igual que con Madián, como con Sisera y Yabín, en el valle del Quisón,
10 cuando fueron abatidos en Endor y quedaron de estiércol en el suelo,
11 Como a Oreb y a Zeeb trata a sus nobles, y a sus príncipes todos, como a Zébaj y Salmunná,
12 que habían dicho: Tomemos como nuestros los campos de Elohím.
13 Redúcelos, mi Dios, cual la gundelia, como la paja presa al viento.
14 Igual que cuando el fuego abrasa el bosque y las llamas incendian las montañas,
15 acósalos así con el ciclón y con tu tempestad aterrorízalos.
16 Recúbreles el rostro de ignominia, hasta hacerles implorar, Yahvéh, tu nombre.
17 Que se azoren y aterren para siempre, que se avergüencen y perezcan.
18 Y que sepan que tú - Yahvéh tu nombre - eres el solo Altísimo sobre toda la tierra.

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Introducción a Salmos

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Fuente: Comentario al Nuevo Testamento (Serafín de Ausejo, 1975)

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Notas