Jeremías  40 La Biblia (Serafín de Ausejo, 1975) | 16 versitos |
1 Palabra que le fue dirigida a Jeremías de parte de Yahvéh después que Nebuzaradán, jefe de la escolta, lo hubo enviado libre desde Rama, donde lo había tomado cuando él estaba aherrojado con cadenas entre todos los desterrados de Jerusalén y de Judá que iban a ser deportados a Babilonia.
2 El jefe de la escolta tomó a Jeremías y le dijo: Yahvéh, tu Dios, había predicho esta desgracia contra este lugar.
3 Yahvéh ha hecho venir y ha realizado lo que había predicho. Porque pecasteis contra Yahvéh y no escuchasteis su voz, por eso os ha sucedido esto.
4 Y ahora, mira: hoy te libro de las cadenas que hay en tus manos. Si te parece bien venir conmigo a Babilonia, ven, y yo miraré por ti; pero si te parece mal venir conmigo a Babilonia, déjalo. Mira: todo el país está delante de ti; vete a donde te parezca bueno y conveniente ir.
5 Y como aún no se volvía, les añadió: Vuelve junto a Godolías, hijo de Ajiqam, hijo de Safan, a quien el rey de Babilonia ha puesto al frente de las ciudades de Judá, y quédate con él en medio de la población; o vete adondequiera que te parezca conveniente ir. El jefe de la escolta le dio provisiones y un regalo, y lo despidió.
6 Jeremías fue entonces a Mispá, donde estaba Godolías, hijo de Ajiqam, y se quedó con él en medio de la población que había quedado en el país.
7 Cuando los jefes de las tropas, que junto con sus hombres estaban en el campo, oyeron que el rey de Babilonia había puesto a Godolías, hijo de Ajiqam, al frente del país y que le había confiado hombres, mujeres y niños, y los de la gente pobre del país, aquellos que no habían sido deportados a Babilonia,
8 fueron con sus hombres a Mispá, donde estaba Godolías. Eran Ismael, hijo de Netanyá; Yojanán y Yonatán, hijos de Qaréaj; Serayá, hijo de Tanjúmet; los hijos de Efay, de Netofá; y Yezanyá, hijo del Maakatí.
9 Godolías, hijo de Ajiqam, hijo de Safan, les hizo, a ellos y a sus hombres, el siguiente juramento: No temáis servir a los caldeos; estableceos en el país, servid al rey de Babilonia, y os irá bien.
10 Por mi parte, aquí estoy residiendo en Mispá, para presentarme ante los caldeos que vengan a nosotros. Vosotros recoged vino, fruta y aceite, ponedlos en vasijas y estableceos en las ciudades que ocupáis.
11 Igualmente, los judíos todos que estaban en Moab, entre los ammonitas, en Edom o en cualquier otro país, cuando oyeron que el rey de Babilonia había dejado un resto en Judá y que al frente de ellos había puesto a Godolías, hijo de Ajiqam, hijo de Safan,
12 todos esos judíos volvieron de todos los lugares por donde andaban dispersos y vinieron al país de Judá, a Mispá, donde estaba Godolías, y recogieron vino y fruta en gran cantidad.
13 Yojanán, hijo de Qaréaj, y todos los jefes de las tropas que estaban en el campo vinieron a Mispá, donde estaba Godolías,
14 y le dijeron: ¿Sabes acaso que Baalís, rey de los ammonitas, ha enviado a Ismael, hijo de Netanyá, para quitarte la vida? Pero Godolías, hijo de Ajiqam, no les dio crédito.
15 Entonces Yojanán, hijo de Qaréaj, habló en secreto a Godolías en Mispá en estos términos: Pienso ir yo a matar a Ismael, hijo de Netanyá, sin que nadie lo sepa. ¿Por qué te ha de quitar la vida, para que así se dispersen todo los judíos que se han reunido en torno a ti y perezca el resto de Judá?
16 No hagas tal cosa - dijo Godolías, hijo de Ajiqam, a Yojanán, hijo de Qaréaj -; pues estás diciendo una mentira con respecto a Ismael.

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Introducción a Jeremías 

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Fuente: Comentario al Nuevo Testamento (Serafín de Ausejo, 1975)

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Notas