Judith 6 La Biblia (Serafín de Ausejo, 1975) | 21 versitos |
1 En cuanto cesó el tumulto de los hombres que hacían círculo alrededor del consejo, Holofernes, general en jefe del ejército asirio, dijo a Ajior, en presencia de todos los extranjeros y de todos los hijos de Moab:
2 "¿Quién eres tú, Ajior, y vosotros mercenarios de Efraín, para profetizar entre nosotros, como lo haces hoy, y para decir que no hagamos la guerra contra la raza de Israel, porque su Dios los cubrirá con su escudo? ¿Y quién es Dios fuera de Nabucodonosor? Éste mandará su fuerza y los aniquilará de la faz de la tierra, y no los librará su Dios.
3 Nosotros, siervos de Nabucodonosor, los aplastaremos como a un solo hombre, y no aguantarán la fuerza de nuestros caballos.
4 Los abrasaremos en sus casas, sus montañas se embriagarán de su sangre; sus llanuras se llenarán de sus muertos y la planta de sus pies no podrá resistir nuestra presencia. Perecerán irremisiblemente, dice el rey Nabucodonosor, el señor de toda la tierra. Así lo dijo, y no resultarán vanas las palabras que ha pronunciado.
5 Y tú, Ajior, mercenario amonita, que has proferido palabras tan insensatas, no verás más mi rostro desde este día hasta que haya castigado a la raza de los que vinieron de Egipto.
6 Entonces el hierro de mi ejército y la lanza de todos mis servidores atravesarán tus costados, y tú caerás entre los heridos de esa gente cuando yo vuelva.
7 Mis siervos te llevarán ahora a la región montañosa y te pondrán en una de las ciudades de sus laderas.
8 No perecerás hasta que seas aniquilado con ellos.
9 No pongas ese rostro tan abatido si de verdad esperas que no serán conquistados. He hablado. No quedará sin efecto nada de cuanto he dicho".
10 Mandó Holofornes a los servidores que estaban a su lado en la tienda que tomaran a Ajior, lo llevaran a Betulia y lo entregaran en manos de los israelitas.
11 Sus servidores lo tomaron y lo sacaron al llano, fuera del campamento. Desde la llanura avanzaron hacia la montaña y llegaron a las fuentes que hay en las laderas de Betulia.
12 Cuando los vieron los hombres de la ciudad que estaban cerca de la cima de la montaña tomaron sus armas, salieron fuera de la ciudad, ocuparon la cima de la montaña y todos los honderos procuraban impedirles la subida disparando piedras contra ellos.
13 Entonces ellos se deslizaron por la ladera del monte, ataron a Ajior, lo dejaron tendido al pie del monte y se volvieron a su señor.
14 Los israelitas bajaron de la ciudad y se acercaron hasta él. Lo desataron y se lo llevaron a Betulia, donde lo presentaron a los jefes de la ciudad.
15 Eran éstos, en aquellos días, Ozías, hijo de Micá, de la tribu de Simeón, Cabrís, hijo de Gotoniel, y Carmís, hijo de Melquiel.
16 Éstos convocaron a todos los ancianos de la ciudad; todos los jóvenes y las mujeres concurrieron también a la asamblea. Colocaron a Ajior en medio de todo el pueblo y le preguntó Ozías sobre lo ocurrido.
17 En respuesta, les hizo saber la deliberación del consejo de Holofernes, todas las palabras que él mismo había dicho ante los jefes de los asirios y todas las insolencias que Holofernes había pronunciado contra la casa de Israel.
18 Entonces el pueblo se postró en tierra, adoraron a Dios y clamaron, diciendo:
19 "Señor, Dios del cielo, considera sus insolencias; apiádate de la humillación de nuestra raza y dirige en este día tu mirada hacia los consagrados a ti".
20 Luego animaron a Ajior y lo felicitaron vivamente.
21 Ozías lo condujo de la asamblea a su casa y ofreció un convite a los ancianos. Y pasaron toda aquella noche invocando la ayuda del Dios de Israel. El asedio de Betulia

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Fuente: Comentario al Nuevo Testamento (Serafín de Ausejo, 1975)

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