Amos  2 Nueva Biblia de Jerusalén (Desclee, 1998) | 16 versitos |
1
Moab.
Así dice Yahvé:
¡Por tres crímenes de Moab y por cuatro,
seré inflexible!
Por haber quemado hasta calcinar los huesos del rey de Edom,
2 enviaré fuego a Moab
que devorará los palacios de Queriyot,
perecerá con estruendo Moab,
con tumulto, al son del cuerno;
3 extirparé de ella al juez,
y con él mataré a todos sus príncipes,
dice Yahvé.
4
Judá.
Así dice Yahvé:
¡Por tres crímenes de Judá y por cuatro,
seré inflexible!
Por haber despreciado la Ley de Yahvé,
y no haber observado sus preceptos,
porque los han extraviado sus Mentiras,
tras las que habían caminado sus padres,
5 enviaré fuego a Judá
que devorará los palacios de Jerusalén.
6
Israel.
Así dice Yahvé:
¡Por tres crímenes de Israel y por cuatro,
seré inflexible!
Porque venden al justo por dinero
y al pobre por un par de sandalias;
7 pisan contra el polvo de la tierra la cabeza de los débiles,
y desvían el camino de los humildes;
hijo y padre acuden a la misma doncella,
profanando mi santo Nombre;
8 se acuestan sobre ropas empeñadas
junto a cualquier altar,
y beben el vino de los multados
en la casa de su dios...
9 Yo destruí ante ellos al amorreo,
alto como los cedros
y fuerte como las encinas;
destruí su fruto por arriba
y sus raíces por abajo.
10 Yo os hice subir a vosotros del país de Egipto
y os conduje por el desierto cuarenta años,
para heredar la tierra del amorreo.
11 Suscité profetas entre vuestros hijos,
y nazireos entre vuestros jóvenes.
¿No es así, hijos de Israel?,
oráculo de Yahvé.
12 Pero vosotros hicisteis beber vino a los nazireos,
y conminasteis a los profetas,
diciendo: «¡No profeticéis!»
13 ¡Pues bien, yo os aplastaré debajo,
como aplasta el carro que está lleno de haces!
14 Entonces le fallará la huida al ágil,
el fuerte no podrá desplegar su vigor,
ni el soldado salvará su vida.
15 El arquero no resistirá,
ni se salvará el de pies ágiles,
el jinete no salvará su vida,
16 y el más valiente de los soldados
huirá desnudo aquel día,
oráculo de Yahvé.

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Introducción a Amos 

Amós.
Amós era pastor en Técoa, en el límite del desierto de Judá, Amó_1:1 . Extraño a las hermandades de profetas, fue tomado por Yahvé de detrás de su rebaño y enviado a profetizar a Israel, Amó_7:14 . Tras un corto ministerio que tuvo como marco principal el santuario cismático de Betel, Amó_7:10 s, y que probablemente también se ejerció en Samaría, ver Amó_3:9 ; Amó_4:1 ; Amó_6:1 , fue expulsado de Israel y volvió a sus antiguas ocupaciones.

Predica en el reinado de Jeroboán II, 783-743, época gloriosa humanamente hablando, en la que el reino del Norte se extiende y enriquece, pero en la que el lujo de los grandes es un insulto para la miseria de los oprimidos, mientras que el esplendor del culto encubre la ausencia de una religión verdadera. Con la rudeza sencilla y noble, y con la riqueza de las imágenes de un hombre del campo, Amós condena en nombre de Dios la vida corrompida de las ciudades, las injusticias sociales, la falsa seguridad que se pone en ritos en que el alma no se compromete, Amó_5:21-22 . Yahvé, soberano Señor del mundo, que castiga a todas las naciones, 1-2, castigará duramente a Israel, obligado por su elección a una mayor justicia moral, Amó_3:2 . El «Día de Yahvé» (expresión que aparece aquí por vez primera) será tinieblas y no luz, Amó_5:18 s, la venganza será terrible, Amó_6:8 s, ejecutada por un pueblo llamado por Yahvé, Amó_6:14 : Asiria, que, sin ser nombrada, ocupa, sin embargo, el horizonte del profeta. Con todo, Amós abre una pequeña esperanza, la perspectiva de una salvación para la casa de Jacob, Amó_9:8 , para el «resto» de José, Amó_5:15 (primer empleo profético de este término). Esta profunda doctrina acerca de Yahvé, dueño universal y omnipotente, defensor de la justicia, se expresa con una seguridad absoluta, siempre como si el profeta no dijera nada nuevo: su novedad reside en la fuerza con que recuerda las exigencias del Yahvismo puro.

El libro nos ha llegado con cierto desorden; en particular el relato en prosa, Amó_7:10-17 , que separa dos visiones, estaría mejor colocado al final de los oráculos. Se puede dudar sobre la atribución al mismo Amós de algunos cortos pasajes. Las doxologías, Amó_4:13 ; Amó_5:8-9 ; Amó_9:5-6 , quizá hayan sido añadidas para la lectura litúrgica. Los breves oráculos contra Tiro y Edom, Amó_1:9-12 , y Judá, Amó_2:4-5 , parecen datar del Destierro. Se discute más acerca de Amó_9:8-10 , y sobre todo de Amó_9:11-15 . No hay razón seria para sospechar del primero de estos pasajes, pero es probable que el segundo haya sido añadido; y esto no por razón de las promesas de salvación que contiene y que, desde un principio, fueron el tema de la predicación de los profetas, lo mismo aquí, Amó_5:15 , que en su contemporáneo Oseas; pero lo que se dice de la cabaña vacilante de David, de la venganza contra Edom, de la vuelta y restablecimiento de Israel, supone la época del Destierro y puede atribuirse, con algunos otros retoques, a una edición deuteronomista del libro.

Fuente: Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros

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Notas

Amos  2,1
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Núm_22:36+; Isa 15-16; Jer 48; Eze_25:8-11; Sof_2:8-11

NOTAS

2:1 La incineración, que debía hacer desgraciada al alma en el más allá, era para el semita un crimen abominable.


Amos  2,3
NOTAS

2:3 Yahvé reprocha a Moab su conducta para con un pagano. A Israel no le afectó este crimen. De aquí se puede deducir que, en los otros oráculos, el comportamiento criminal es condenado en sí mismo y no porque Israel sea víctima de él. Para Amós, la misma ley moral rige para todos los hombres.

Amos  2,4
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Isa_5:24; Jer_7:28; Lev_26:14-15

NOTAS

2:4 (a) Este oráculo de estilo deuteronómico es probablemente una relectura de Judá, ver Ose_1:7+. Muchos piensan que lo mismo ocurre con los oráculos contra Tiro y Edom.

2:4 (b) Es decir, sus ídolos.

Amos  2,5
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Ose_8:14

Amos  2,6
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] = Amó_8:6

NOTAS

2:6 (a) Los oráculos contra las naciones son un elemento habitual de la predicación profética, Is 13-23; Jr 46-51; Ez 25-32. Al incluir entre ellos a Israel, Amós debía de provocar sin duda el asombro y la ira de sus oyentes, indignados de ser contados entre los paganos.

2:6 (b) Los profetas protestan a menudo contra la venalidad de la justicia, Amó_5:7; Amó_6:12; Isa_1:23; Miq_3:1-3, Miq_3:9-11; Miq_7:1-3, etc.

Amos  2,7
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Isa_3:15

[2] Deu_27:20; Deu_23:19 [Deu_23:18]

NOTAS

2:7 (a) Texto difícil: «pisan», tomando la raíz sa'af como una forma (por lo demás bien atestiguada) de la raíz sûf, y no como la raíz más corriente sa'af «aspirar a», «estar ávido de». -Antes de «la cabeza» omitimos «por» o «con». -«contra el polvo de la tierra», omitido por el griego, se considera a veces como una adición. -La codicia de los grandes: otro tema profético, Amó_8:5-6; Isa_1:17, Isa_1:23; Isa_3:14; Miq_2:1-2, Miq_2:8-11; Miq_3:9-11; Miq_6:9-12; Sof_1:9; Jer_2:34; Eze_22:29.

2:7 (b) Sin duda no se trata de una prostituta sagrada, sino más bien de una esclava doméstica tomada como objeto de placer por el padre y el hijo. Lo que se condena no es tanto la apariencia de incesto como la degradación infligida a un ser humano. Lo que atenta contra la dignidad del hombre atenta contra Dios.

Amos  2,8
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu_24:12-13

NOTAS

2:8 En las comidas sagradas que seguían a los sacrificios. -«su dios»: se trata de Yahvé, a quien se le rebaja al rango de un ídolo —de ahí la minúscula en la traducción— cuando se le «honra» banqueteando con los bienes quitados a los desvalidos bajo apariencia de legalidad: multa o confiscación de los bienes de un deudor insolvente, ver Sir_34:20.

Amos  2,9
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu_7:1+; Deu_9:1-2

[2] Ose_9:16; Job_18:16

NOTAS

2:9 Expresión, proverbial sin duda, de una destrucción total.

Amos  2,10
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu_2:7

Amos  2,11
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Deu_18:18+

[2] Núm_6:1+

Amos  2,12
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Amó_7:12-13; Isa_30:10; Jer_11:21; 1Re_22:8; 1Re_22:27

NOTAS

2:12 En todo este oráculo sobre Israel, la culpa del pueblo se presenta no sólo como una infracción de las leyes, sino también y sobre todo como una negativa a la llamada y solicitud divinas.

Amos  2,13
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Amó_1:3+

Amos  2,14
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Amó_9:1

Amos  2,15
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Jer_46:5

Amos  2,16
REFERENCIAS CRUZADAS

[1] Mar_14:52; Amó_5:18+