Eph 1,4-5

Vio Dios que la luz estaba bien, y apartó Dios la luz de la oscuridad; y llamó Dios a la luz «día», y a la oscuridad la llamó «noche». Y atardeció y amaneció: día primero.

Nueva Biblia de Jerusalén (1998) - referencias, notas e introducciones a los libros


NOTAS

1:4 La luz es creación de Dios; las tinieblas no lo son, y constituyen su negación. Se menciona en primer lugar la creación de la luz porque la sucesión de los días y las noches va a ser el marco en que se desarrollará la obra creadora. Además, desde un punto de vista ingenuo, sólo se puede trabajar cuando la luz permite ver lo que se hace.
Genesis 1, 4

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